miércoles, 1 de octubre de 2014

Ánsar doméstico vs. salvaje

La semana pasada nos sorprendió ver un Ánsar Común (L 74-84 cm, E 149-168) nadando por el canal de Amute. 

Antzara Hankagorriska - Ánsar Común - Anser anser

El año pasado, no fue hasta mediados de octubre que empezamos a ver bandos de ánsares en migración volando sobre Plaiaundi. Uno de los ánsares decidió pasar parte del invierno (noviembre-enero)  en nuestro humedal dejándose ver sobre todo por la zona de Itzaberri. Por eso, el mes de septiembre nos pareció muy pronto para que un ejemplar de ánsar común se asomara por aquí.

Cuando se acercó a la orilla pudimos  observar su abultado vientre. Hecho que apuntaba a que el origen de nuestro protagonista era probablemente doméstico.

Antzara Hankagorriska - Ánsar Común - Anser anser
Antzara Hankagorriska - Ánsar Común - Anser anser

Lo cierto es que en Jaitzubia hay una granja de gansos y probablemente éste se habría escapado de allí.

Antzara Hankagorriska - Ánsar Común - Anser anser
Antzara Hankagorriska - Ánsar Común - Anser anser

Para comparar este ánsar común doméstico con otro salvaje, a continuación tenemos una fotografía tomada a uno de los ánsares comunes salvajes que han criado este año en Salburua.

Antzara Hankagorriska - Ánsar Común - Anser anser

Si nos fijamos en el vientre de ambos ánsares, es patente la diferencia. El ánsar doméstico tiene un vientre prominente mientras que el salvaje muestra una figura más esbelta.

Abajo, el ánsar común de Salburua con su prole:

Antzara Hankagorriska - Ánsar Común - Anser anser

De momento, estaremos atentos al cielo porque, más pronto que tarde, empezaremos a ver pasar bandadas y bandadas de gansos sobrevolando nuestras cabezas y llenando nuestros oídos de estridentes graznidos.