2ª etapa
Una de las etapas de nuestra gira pajarera durante el mes de junio nos condujo hasta la Sierra de
Gredos en Ávila. Accedimos por Hoyos del Espino hasta la Plataforma de
Gredos donde aparcamos la furgoneta en medio de un coro de Escribanos Hortelanos que amenizaba la llegada de los visitantes. Para nosotros fue un verdadero acontecimiento pues se trataba de la primera vez que veíamos esta especie de ave.
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Escribano Hortelano |
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Escribano Hortelano |
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Escribano Hortelano |
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Escribano Hortelano |
Al comienzo del recorrido, un letrero informaba que la excursión hasta la Laguna
Grande de Gredos duraba dos horas y media. No es mucho tiempo para quién va a
hacer trekking, pero en nuestro caso,
que íbamos a hacer birdwatching, la
duración de la excursión iba a ser bastante mayor.
Para empezar, ya nos habíamos entretenido veinte minutos observando y fotografiando los
escribanos hortelanos en la Plataforma. Pero es que, a unos trescientos metros
del punto de partida, se asomó un roquero rojo a una gran roca granítica situada
a la orilla del camino. Estuvo un buen rato observando el fluir de
excursionistas que se dirigían hacia la laguna. Nunca habíamos tenido un
roquero rojo tan cerca. Siempre los habíamos visto en las cimas de los roquedos
a cientos de metros de distancia.
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Roquero Rojo |
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Roquero Rojo |
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Roquero Rojo |
La excursión no había hecho más que empezar y ya prometía ser muy interesante. Cuando
llegamos a los dominios del piornal (matorral), una alegre melodía despertó
nuestra atención. Se trataba de nuestro primer ruiseñor pechiazul, del que
habíamos oído que se suele ver en Plaiaundi en las épocas migratorias. Pero
aquí, en Gredos, reside todo el año. Cantaba posado sobre la argoma, y también
durante los cortos vuelos casi verticales tras los cuales desaparecía en el
piornal hasta que, al poco, volvía a emerger para posarse de nuevo sobre la
argoma.
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Ruiseñor Pechiazul |
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Ruiseñor Pechiazul |
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Ruiseñor Pechiazul |
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Ruiseñor Pechiazul |
Ya habíamos invertido las dos horas y media que se indicaban en el letrero de la
entrada para llegar a la Laguna Grande de Gredos, pero sólo habíamos recorrido
aproximadamente un kilómetro del total de siete que hay hasta la laguna. Decidimos,
pues, continuar ascendiendo por un camino algo empinado hasta llegar a una zona
en la que la nieve invadía el camino. Fuimos caminando, ayudados por los sticks, hasta llegar a la zona de Los
Barrerones, desde donde divisamos la Laguna Grande de Gredos.
Allí, una cabra
montesa, al ver que sacábamos algo para comer, se nos acercó mientras un
acentor común cantaba desde lo más alto de un matorral para después posarse muy
confiado a nuestros pies, cual gorrión común, para picotear algunas migajas.
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Acentor Común |
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Acentor Común |
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Acentor Común |
El día iba avanzando y no quedaba mucho para llegar a la Laguna Grande de Gredos, pero visto que durante el último trecho recorrido apenas habíamos
avistado aves, decidimos no continuar adelante y volver hacia el punto de
partida, donde habíamos disfrutado con la observación de roqueros rojos,
ruiseñores pechiazules, escribanos hortelanos, collalbas grises, acentores
comunes, alondras comunes, escribanos montesinos, etc.
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Collalba Gris |
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Collalba Gris |
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Collalba Gris |
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Escribano Montesino |
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Escribano Montesino |
De esta manera, volvimos a disfrutar de estas
especies, y también de un nutrido grupo de cabras montesas que caminaba sobre las
grandes rocas graníticas cerca de la Plataforma.
La próxima etapa iba a pasar por el Parque Natural de Monfragüe, por lo que
decidimos aproximarnos a nuestro destino de víspera y elegimos Plasencia para
pernoctar. Desde Gredos cogimos la carretera que pasa por el Valle del Jerte
para llegar a Plasencia. Una carretera sinuosa y, para colmo, en obras. Compramos un par de cajas de cerezas en Tornavacas, como no podía ser de otra
manera. No puedes pasar por el Jerte y no probar sus cerezas.
Por la noche en "La Isla" de Plasencia, sobre el río Jerte, los autillos empezaron a cantar. Nos acercamos para intentar ver alguno de ellos, pero son
tan pequeños y se confunden tan fácilmente con la corteza y las ramas de los árboles que no
conseguimos ver ninguno. De madrugada también oímos los chillidos de algunas
lechuzas que finalmente pudimos ver al amanecer volando sobre el parque de La Isla.
Días de Intenso Pajareo en junio:
1ª etapa. Laguna de La Nava y Tierra de Campos.
2ª etapa. Recorriendo la Sierra de Gredos.
3ª etapa. Parque Natural de Monfragüe.
4ª etapa. Llanos de Cáceres.
5ª etapa. La Serena.
6ª etapa. Arribes del Duero.