El Ruiseñor del Japón (L 15 cm) es una especie de la familia timaliidae originaria del sur de Asia que fue introducida en Japón hace tres décadas. Así pues, no es originario del Japón, y tampoco es un ruiseñor ya que no pertenece a la familia de los ruiseñores (turdidae). Sin embargo, el maravilloso canto que posee el Ruiseñor del Japón es comparable al de un ruiseñor común.
Existen algunas colonias de Ruiseñores del Japón en la Península Ibérica procedentes de aves escapadas. Se trata de una especie exótica catalogada como invasora ya que constituye una amenaza para las especies autóctonas, los hábitats y los ecosistemas. Por eso, está prohibida su introducción en el medio natural, posesión, transporte, tráfico y comercio.
En octubre del pasado año un grupo de Ruiseñores del Japón, formado por una veintena de indivíduos, estuvo revoloteando confiadamente por el Parque Ecológico de Plaiaundi. Pero en aquella ocasión no tuve la suerte de verlos. Sin embargo, gracias a Iñaki de las Heras, que anunció ayer en su blog la presencia de un grupo de Ruiseñores del Japón en el Parque de Kristina Enea de Donostia, por fin hoy he disfrutado de esta preciosidad de ave en plena naturaleza.
