El Eider común (Somateria mollissima) reside en las costas del norte de Europa. Aunque llegan muy pocos ejemplares, a lo largo del invierno podemos llegar a ver alguno en las costas cantábricas.
Llegan en busca de alimento y de condiciones climatológicas mas favorables a finales de año, para regresar a los mares del norte una vez pasado el invierno.
El ejemplar que nos ocupa llegó a la bahía de Santoña, en Cantabria, el mes de diciembre de 2016. Pasado el invierno, como todos los años, gran número de ejemplares de diferentes especies de aves abandonaron la bahía para dirigirse hacia el norte de Europa. Pero por las circunstancias que sean, este ejemplar de eider común decidió quedarse.